viernes, 20 de enero de 2012

Contra el viento: entrevista de estilo indirecto

Angeles Caso saca su mejor raza periodística para ofrecernos la vida y milagros de Sao. Una heroína de nuestro tiempo que nacida en Cabo Verde decide emprender su gran aventura y superando las dificultades de origen, raza, educación y sexo, viaja hacia una vida mejor. Es la historia de una mujer valiente que enfrentada al mundo buscará el apoyo de otras mujeres para salir de la ignorancia y la pobreza. Angeles Caso recibió el Premio Planeta en el año 2009 por esta novela, pero yo creo que la que merece un premio es su protagonista: una mujer de carne y hueso que contó su terrible historia a la periodista. La autora se limitó a poner en negro sobre blanco el espíritu y la energía que Sao emana por todos sus poros: como en una larga entrevista de estilo indirecto.
Todos conocemos a  muchas Saos: esas empleadas de hogar que llegadas desde otros mundos se instalan en nuestras casas para cuidar de niños y mayores y constituyen el núcleo de unas familias en las que la madre ha pasado a ocupar otro papel. Un nuevo rol que sin ellas no sería posible. Actualmente hay en España 700.000 trabajadoras en este sector doméstico.  De esa cifra, el 93 % son mujeres y casi un tercio son extranjeras. 
La nueva ley de servicio doméstico  que entró en vigor este año será un alivio y una amenaza para ellas. Logran un trato más justo al establecerse la obligación a la cotización a la seguridad social desde la primera hora de trabajo, el derecho a vacaciones, baja y pagas extras. Sin embargo, en los tiempos que corren, muchos de los empleadores, en la mayoría de los casos madres trabajadoras que ahora mismo ven peligrar sus empleos, optarán por prescindir de estas empleadas por no poder afrontar el sobrecoste que supone cumplir con la ley. 
Lo de siempre: una realidad con dos caras. 

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4 comentarios:

  1. Un muy buen análisis de una gran autora.
    Besos

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  2. Gracias, ahí vamos a por los 25...

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  3. Muchos emplean extranjeras sin contrato, porque salen más baratas (juegan con la necesidad de la gente y las explotan) y algunos no son precisamente de los que peligra su empleo ni tienen dificultades económicas, de todas formas estoy de acuerdo en mucha gente saldrá perjudicada. Leeré el libro, gracias.

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